jueves, 10 de enero de 2019

Cristianismo






Jesús de Nazaret, el fundador de la religión cristiana, nació en la provincia romana de Judea durante la pax romana, cuando aún gobernaba su primer emperador, Octavio Augusto. En su mensaje anunciaba el reino de Dios, la salvación eterna, el amor al prójimo y la igualdad de todos como hijos de un único Dios. Si bien los primeros cristianos eran de origen judío, su mensaje no fue aceptado por toda la comunidad hebrea. Jesús, tras ser acusado de alborotar al pueblo, fue condenado a morir crucificado.


Los romanos toleraban el culto a otros dioses, pero a partir del siglo III d. C. los cristianos comenzaron a ser perseguidos con violencia. Durante el siglo IV, sin embargo, fueron paulatinamente aceptados por el Imperio. En el año 306 el emperador Constantino declaró la libertad de culto mediante el Edicto de Milán.



Los cristianos fueron perseguidos por su
supuesta implicacion en el incendio del 64 DC
Cuadro de oleo por E.R Thirion
.


Conocido tambien como la Tolerancia del Cristianismo, el dictado de milan fue promulgado en el año 313 y en el se establecia la libertad de religion en el imperio Romano, dando fin a las persecusiones dirigidas por las autoridades contra ciertos grupos religiosos, particularmente los cristianos.








Tedosio  decreta el Edicto de Tesalónica en el 380 d. C. A partir de este edicto, el cristianismo se convierte en la religión oficial del Imperio Romano. A pesar de ello, Teodosio protegió dentro de sus posibilidades el culto clandestino de las antiguas deidades que conformaban el panteon romano.












A partir del siglo III d. C. el Imperio entra en crisis. Las causas que explican su decadencia son múltiples y aún se debaten entre historiadores.


 En el año 395 d. C., para frenar la crisis, el emperador Teodosio dividió el Imperio en Oriente y Occidente, sin embargo, ello no dio resultado. Los pueblos germanos, que durante siglos habitaron en las fronteras del Imperio, comenzaron a influir en la política romana, tanto a través de la diplomacia como de la guerra, y paulatinamente se fueron asentando de forma definitiva en territorios del Imperio . En el año 476 d. C. el germano Odoacro tomó la ciudad de Roma, depuso al emperador y se proclamó rey de Italia. Este evento ha sido interpretado como el final del Imperio romano de Occidente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario